Muchos
dicen que el verdadero amor es un mito y jamás se encuentra. Otros dicen que el
verdadero amor está en los hijos, porque es incondicional y otros finalmente
hablan de que el verdadero amor solo lo encuentras en Dios. Considero que todas
estas cosas son verdad, ya que para muchos el verdadero amor es un mito pues
jamás lo encuentran, y bueno, es evidente que la mayor parte del tiempo
nuestros hijos y Dios nos aman incondicionalmente, pero hablando de relaciones
de pareja es difícil hablar del verdadero amor, a pesar de ello, en este blog
hablaré de ello.
Hace ya
bastante tiempo, en algún momento pensé casarme con quien pensaba era el
amor de mi vida, sin embargo las cosas no andaban bien y finalmente esa
relación se rompió. Esto me llevó a analizar profundamente que había sucedido y
cómo es que finalmente yo había llegado a la conclusión de casarme con alguien
con quien era absolutamente incompatible y además creía que lo amaba. Entonces
después de pensar y repensar el asunto, me di cuenta que si ... le quería
mucho, le estaba agradecida de muchas cosas y era evidente que mi vida hasta
ese entonces había girado en torno a él, y la costumbre de verle todos los días
y el compromiso social que había, jugó un papel muy importante en mi forma de
pensar de aquel entonces. Sin embargo como pueden ver... finalmente amor
verdadero no había.
Cuando
doy un vistazo hacia el pasado de mi vida, me parece increíble el ver cómo las
circunstancias me hacían ver algo que no era verdad. Desde entonces procuro
mirar a las personas de una forma menos idealizada y más aterrizada,
aprendiendo a aceptarlas como son, con sus defectos y virtudes. Pero hablando
en términos del amor, si, hoy si puedo decir que entiendo bien que es el amor
verdadero.
Y es que
el amor verdadero es aquel que te marca, que te hace volver a él una y otra
vez, a quien esperas todo lo que sea necesario y quien perdonas todo lo que sea
necesario, a quien conoces bien y aun conociendo sus peores defectos, los
obvias y sigues manteniendo ese mismo afecto de manera intacta y una y otra vez
tus pensamientos te trasladan a esa persona, sacando lo mejor de ti.
La verdad
no cómo sucedió, ni de qué manera explicar con palabras todo esto, pero hoy
comprendo que finalmente el amor, el cual me ha llevado a sentir lo más hermoso
de la vida y deseo que permanezca así por el resto de mi vida.
Cuando
encuentras a la persona que te hace sentir así, realmente no hay cabida para
nadie más, es probable que logres querer a otras personas y sentir un gran aprecio
por ellas, por su valor como personas, pero esa persona especial
definitivamente está en otra categoría para ti. Sin embargo, es curioso, pero
esto tan especial no quita para nada el hecho de que la otra persona tenga
defectos y en ningún caso implica que jamás sufrirás al lado de esa persona...
y es que probablemente por el hecho de amarle justamente cualquier cosa que lo
incluya, definitivamente te afecta a ti y es muy posible que en más de alguna ocasión
derrames alguna lágrima por su causa o viceversa, sin embargo creo que solo
aquellos que llevan muchos años de casados y siguen amándose, entenderán lo que
digo... el Amor verdadero, no depende de la otra persona, sino del lugar en tu
corazón que has decidido darle y que de forma consciente o inconsciente te
lleva a constantemente encontrar nuevas maneras de entregar tu amor hacia esa
persona, lo que te permite pasar una eternidad junto a ella sin aburrirte, te
insta a renovarte cada día, te das cuenta que pueden pasarte mil cosas en el
día, buenas y malas, pero que cuando llega la noche, te acuestas y vez que está
a tu lado ... ah que bueno es!, entonces comprendes que nada supera eso, su
compañía y la oportunidad de compartir juntos diariamente, disfrutar con cada
detalle, a veces puede ser la forma como sonríe, o la manera tan delicada como
toma un té, o el cariño que le entrega a tus hijos y te das cuenta que todo eso
también es para ti, entonces vuelves a mirarla y vez la belleza de lo que
siente tu corazón por esta persona.
Entonces
concluyo lo siguiente... enamorarse, te puede pasar todos los días, …pero
AMAR, solo pasa una vez en la vida para aquellos que son afortunados de
encontrar en una persona con todas aquellas características que soñaron desde
jóvenes, debía tener la persona perfecta para ustedes.
El amor trasciende
el tiempo, la distancia y aún la paciencia. Rompe barreras y definitivamente te
hace sentir completo y feliz.
Finalmente
les dejo lo siguiente para que mediten, de acuerdo a la definición bíblica el
amor es así y es aplicable a todas las formas de amar:
1 Corintios 13
Reina-Valera
1960 (RVR1960)
La preeminencia del amor
13
Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como
metal que resuena, o címbalo que retiñe.
2 Y si tuviese profecía, y
entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal
manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.
3 Y si repartiese todos mis bienes
para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no
tengo amor, de nada me sirve.
4 El amor es sufrido, es benigno;
el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece;
5 no hace nada indebido, no busca
lo suyo, no se irrita, no guarda rencor;
6 no se goza de la injusticia, mas
se goza de la verdad.
7 Todo lo sufre, todo lo cree, todo
lo espera, todo lo soporta.
8 El amor nunca deja de ser; pero
las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
9 Porque en parte conocemos, y en
parte profetizamos;
10 mas cuando venga lo perfecto,
entonces lo que es en parte se acabará.
11 Cuando yo era niño, hablaba como
niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; mas cuando ya fui hombre, dejé lo
que era de niño.
12 Ahora vemos por espejo,
oscuramente; mas entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero
entonces conoceré como fui conocido.
13 Y ahora permanecen la fe, la
esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor.
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